El espacio, representado de tantas maneras que podríamos vincularlo a infinidad de líneas temporales o dimensiones diferentes. Starpoint Gemini 2 nos traslada a una aventura futurista donde nos introducimos en la piel de un comandante de una nave de la Liga Gemini tras una gran guerra que arrebató el liderazgo de la galaxia para convertirla en un espacio independiente. Una situación pésima para un organigrama del Imperio Tierra, cuyos miembros apenas permanecen y que nos exilia a un universo repleto de peligros, en una trama en la que se busca recuperar la gloria perdida.
Muchos son los títulos que abordan una experiencia futurista en el espacio en estos días, siendo Starpoint Gemini, una alternativa curiosa, cuanto menos. Lejos de ahondar en la acción de otros títulos espaciales, como es Star Citizen o Elite Dangerous, Starpoint Gemini 2 nos lleva a una experiencia que se centra más en el rol, donde, la gestión de recursos, los combates y la obtención de habilidades, abren la puerta a una nueva propuesta dentro de esta ambientación.
Un vasto universo, repleto de peligros, planetas y opciones, son los fundamentos básicos de Starpoint Gemini 2, los cuales pueden ser vinculados a una experiencia ligada a una historia, que nos pone en una situación dramática frente a la pérdida de la gran guerra, sino que también ofrece una libertad total cuando abordamos las acciones, incluso, con un modo de juego totalmente libre de narración y de misiones obligatorias.
Desde las cenizas
Aquellos que jugaron a Starpoint Gemini se encontraron en una aventura donde el crecimiento del imperio era la principal baza argumental de la experiencia. Sin ser importante su argumento, aunque pueda ayudar a conocer mejor detalles de esta entrega. Sin embargo, lo importante, es que tras la debacle de la guerra, la alianza Gemini se vio abocada a desaparecer, si bien, nosotros estamos aquí para verla renacer ante el resurgimiento de un gran número de facciones que pugnan por cada fragmento del espacio.
A la hora de hacer frente a la historia, nos vinculamos a un personaje, el hijo del gran General Paul Demetrius, que intentará vengarse así como recuperar aquello en lo que su padre creía. Para ello, se disponen una serie de misiones principales que debemos completar para conocer el devenir de esta historia. Pero realmente, esta no es más que un pequeño detalle que sirve para incentivar al jugador a conocer mejor este universo que se ha creado para una experiencia mucho mayor, donde alianzas, facciones, sistemas, planetas, naves y recursos son elementos que debemos de valorar a la hora de hacer frente a toda esta experiencia. De hecho, se puede observar como, dentro de la advertencia de nivel recomendado, la historia escala mucho más rápido que nosotros en este requisito, sugiriendo, de algún modo, que abramos la mente y disfrutemos de una propuesta muy diversa.
Es aquí donde encontramos un sinfín de posibilidades para disfrutar de Starpoint Gemini 2, donde desde transportar mercancía, investigar, recolectar, escoltar, capturar o escoltar, son posibles objetivos de infinidad de misiones que irán apareciendo de forma dinámica en el extenso mapa de los sistemas que recoge este título. De este modo, obtener dinero y experiencia será lo que nos permita incrementar nuestra probabilidad de éxito y avanzar en esta historia. Sin menospreciar la intención de narrar una aventura, de presentarnos un universo que ambienta esta secuela, podemos dar cuenta de que no respresenta más que un detalle en un inmenso universo lleno de posibilidades.
Un universo por conquistar
En el fondo, Starpoint Gemini 2 no es un título en el que necesariamente tengamos que hacer frente a campañas bélicas para reconquistar los sistemas, es más bien una experiencia individual que, gracias a la interpretación del rol con naves espaciales, permite ahondar en una experiencia que tiene muchos matices que ensalzan una experiencia atractiva e inmersiva. Lejos de ser un juego de acción, donde hay que ser hábiles pilotos para hacer frente a combates multitudinarios, Starpoint Gemini 2 fija su objetivo en la preparación de la nave, la disposición de sus técnicos, soldados, incluso formar una flota.
De primeras, da la opción de seleccionar entre una de las tres clases principales que determinarán en que experiencia nos centramos, pudiendo ser un Comandante, que gestiona mejor las flotas, un Artillero, que domina el combate, o un Técnico, que domina las evoluciones tecnológicas y la investigación. Tres líneas de acción que, sin ser excluyentes, definen como podemos progresar a lo largo de la experiencia propuesta. Claro que, para ir evolucionando en las diferentes ramas, debemos ganar experiencia y subir de nivel. Esto se consigue combatiendo, investigando, capturando, mercadeando o ayudando a los miembros de esta gran comunidad. Una vez que obtengamos puntos derivados del ascenso de nivel, podremos seleccionar entre las ramas que potencian el combate, la defensa, la maniobrabilidad, incluyendo ciertos beneficios específicos cada ciertos niveles. Como un juego de rol, iremos obteniendo un mayor rango en la galaxia, rango que determinará, además, el acceso a otras naves y posibilidades de hacer frente a opciones, como es, comandar una flota, ya que, desde un principio, nos dan la opción de poder llevar adjunto a algún mercenario que por una cantidad de dinero, nos acompañará.
De este modo, nos prepararemos para abordar misiones cada vez más dificiles, incluso pudiendo convertirnos en un cazarrecompensas, ya que determinados individuos, tienen un precio a su cabeza que sería importante considerar para nuestra economía. Y es que las piezas no son baratas, mucho menos las naves. Algo que incentivará al jugador a seguir evolucionando, mucho más inmersivo cuando no estamos mirando si podemos continuar una historia que, como telón de fondo, ayuda a comprender este título.
Destruye, investiga, saquea, comercia…
Hemos comentado que Starpoint Gemini 2 permite, además de seguir un modo historia que abre las puertas a la mayoría de opciones que ofrece el juego, un modo libre que nos dejará totalmente libres. Siendo ese modo historia una buena opción para ir conociendo todos los aspectos que depara este juego, resulta importante tener todo controlado antes de abordar la acción sin ataduras, con total libertad. Hemos comprobado que el juego ofrece muchas posibilidades, permitiendo en esta ocasión centrarse en la evolución individual, aunque también podemos contar con los beneficios de las flotas contratadas.
Es aquí cuando nos sentiremos más libres para hacer lo que deseemos, que vendrá a ser lo mismo, pero con un toque más personal. Personalizamos la nave, tomaremos el control de nuestro destino y haremos frente a lo que se ponga por delante. Seguimos abordando la experiencia de la misma forma, donde encontrarse con enemigos es fácil, crearlos, mucho más. Según sea el color del indicador, verde, azul o rojo, tendremos una descripción de lo que nos encontramos, siendo el rojo, siempre un enemigo que podemos destruir sin que haya consecuencias.
A la hora de combatir, el juego carece del dinamismo que ofrecen los juegos de acción, pero tiene las bases roleras y la libertad del espacio para abordar un estilo que podría determinarse como clásico, se podría decir que es una especie de Diablo en el espacio, ya que fijaremos nuestro objetivo y haremos uso de las dos armas que podemos equipar, si bien, haremos uso de potenciadores y otras habilidades. Se puede optar por jugar en tiempo real, o bien, llevar a cabo una gestión de los recursos en un menú de interacción que permite dar órdenes, bien podían haber empleado Kinect para esto, hubiese sido un acierto, no obstante, no vamos a usar este argumento para devaluar una propuesta que, por este tipo de acción propuesta, resulta muy interesante.
Uno de los aspectos que puede haber sido más complicado de llevar a cabo es la adaptación de los PC, con su teclado y ratón, a un sistema limitado en opciones, pues el número de botones es limitado. De ahí, que observemos que el menú de acción es ajeno a la acción, si bien, debemos seleccionar con la vista, que a veces nos volverá locos, el objeto con el que interactuar y así, mediante este menú a modo de pausa, tomar una decisión. Se puede optar por combatir directamente, pero mientras mantenemos un objetivo marcado, el resto de miembros de la tripulación pueden estar abordando otras tareas.
Claro que siempre es más atractivo ganar un combate y saber que es reflejo de nuestra habilidad a los mandos de nuestra nave, pero considerando que podemos llevar auténticas moles, en las que equipar infinidad de armas a su alrededor, que sea un título que combina este tipo de acción resulta realmente atractivo. Cuando comienza el combate surge un holograma alrededor de nuestra nave que nos aporta información sobre cada flanco, y, no es igual una corbeta que una fragata o una nave de combate, las posibilidades son muy diferentes. De este modo, se comprende mucho mejor el concepto RPG, siendo una propuesta realmente atractiva, cuando conseguimos enterarnos de cómo funciona todo.
Perdidos en el espacio
Starpoint Gemini 2 es complejo, si bien, lo que más ahonda esa sensación es que está totalmente en inglés y en muchas ocasiones haría falta una explicación mejor. Como hemos dicho, la campaña está bien pensada para ir tomando contacto con la experiencia, además de conocer los entresijos de este universo, pues, entrar a las bravas en el modo libre es demencial, no hay explicación sobre qué hacer. Y ante nosotros se abre un universo entero, un mapa gigantesco que, dadas las circunstancias, puede estar totalmente vacío o ser un manantial de oportunidades, todo depende de como lo comprendamos.
Satélites, estaciones espaciales, planetas, distorsiones, pulsos gamma, naves, ejércitos y agujeros de gusano que nos permitirán viajar, sin conocer destino, a cualquier punto del mapa. Una aventura abierta para todos, que sin llegar a poder descubrir un paisaje bello y repleto de detalles, si encontramos un escenario repleto de opciones, con una diversidad de escenarios bastante interesante, que consigue dar uno u otro aspecto en base a lo que de fondo podemos encontrar. De este modo, ver las estrellas, los soles, sistemas, planetas, o una tormenta eléctrica gigantesca, resulta espectacular, pero sin que resulte un alarde tecnológico sobrecogedor que ponga en riesgo un rendimiento que, salvo por cargas, es constante y fluido. No es que el juego deba exigir demasiado, si bien, hay que reconocer que la creación de todo este vasto mapa, incluye muchos matices que aportan ese carácter especial a cada región o prefectura.
Claro que, en ocasiones, la presencia de determinadas estructuras en el mapa puede dar al traste con la fluidez con la que suele transcurrir la experiencia, algo que, sobre todo en combate, sirve para causar más de un quebradero de cabeza. Son errores, que bien diluyen la apasionante propuesta, por molestar o disturbar un sistema de combate que, si bien podemos fijar la cámara en el objetivo, un pequeño toque en el stick puede cambiarlo y generar un caos innecesario, pues regresar al punto anterior, se torna imposible. Tomar el control de la cámara libre en ese momento es una locura y si se tercia algún elemento que nos saque de nuestra posición, o pare la acción por una carga, podría ser letal si fuese un juego de acción. Pero todo dependerá del nivel que tengamos, como hayamos equipado la nave y si tenemos aliados en nuestra compañía. Es complejo, es profundo y muy apasionante.
Numerosas prefecturas, con regiones diversas, gobiernos diferentes y multiples facciones luchando por sobrevivir, conquistar y gobernar. Nosotros solo somos un pequeño grano de arena en un desierto, pero gracias a un concepto RPG, el juego ofrece un sinfín de posibilidades para disfrutar de un espectáculo que, sin sorprender, resulta atractivo. Cuanto menos, correcto.
Una experiencia diferente
Starpoint Gemini 2 es un título interesante, sobre todo, para los amantes de las aventuras espaciales, si bien, puede extrapolarse para aquellos que busquen algo diverso, amplio y rico en posibilidades. No solo por el catálogo de opciones, también por el tipo de acción que desvela en una propuesta rolera abordando una temática tan inusual para el género como es el espacio. Visualmente correcto, no compromete el rendimiento, el aspecto más controvertido puede ser la compleja comprensión, dado el idioma, así como la adaptación de la combinación teclado ratón a un mando de consola.
No obstante, tras horas de práctica, conociendo mecánicas, descubriendo planetas, abordando misiones, mejorando nuestra nave y ganando dinero, la propuesta resulta profunda, hasta el punto de no ver un límite, aunque pueda pecar de parecer monótono y repetitivo. Puede que eso convierta a Starpoint Gemini 2 en un producto algo plano, pero todo es debido a la amplitud y lo que se tarda en llegar a los objetivos que podemos marcarnos, incluso, intuir su presencia, pues poco a poco descubriremos, que lo que puede hacerse es tan amplio como el universo que dispone para ser descubierto.
Una propuesta arriesgada, un título valiente, no obstante, su ambición logra captar la atención de los amantes del género o los apasionados de este tipo de ambientaciones. Ofrece mucho, si bien, en un estilo muy peculiar que puede resultar poco atractivo para aquellos que busquen más acción que diversidad. A veces, la fórmula compleja no es la más atractiva, pero Starpoint Gemini 2 es un producto que, si bien puede mejorar, ofrece una primera inmersión en un estilo muy poco convencional.