Ultratron es un arena shooter que pretende adaptar las mecánicas clásicas del género combinándolas con elementos como la personalización de su sistema de mejoras. Puppy Games, el estudio que ha llevado a cabo Ultratron, nos pone en la piel de un robot que debe vengas a la humanidad, que ha sido aniquilada por una malvada raza de robots asesinos.
Ultratron está inspirado en el clásico arcade «Robotron: 2084», lanzado en 1982 por Williams Electronics. Al igual que en este, el objetivo es ir superando las oleadas de robots que van llegando, mientras ganamos todos los puntos posibles. Aunque la intención de Puppy Games ha sido la de introducir algunos elementos diferenciadores para adaptar el juego a las posibilidades actuales. Además del obvio remodelado técnico, se ha incluido un sistema de progresión que mejora el juego sustancialmente. Eso sí, se sigue manteniendo el control original con dos sticks.
Todo un arsenal para solo dos botones y dos sticks
Para cumplir esta tarea tendremos a nuestra disposición, además de nuestra arma principal, un arsenal de bombas y drones, y una serie de mejoras tanto para ellos como para nosotros mismos. Dos sticks y dos botones, no necesitaremos nada más. Y es que en Puppy Games han querido que la experiencia mantenga la sencillez del juego arcade. Con el stick izquierdo nos movemos por la arena (que por cierto solo ocupa tres cuartas partes de la pantalla), mientras que con el derecho disparamos. Tan sencillo como dirigir el stick hacia el lugar en el que estén los enemigos para disparar contra ellos. Los dos sticks serán los controles principales, pero luego, tenemos la posibilidad de usar los gatillos para lanzar las bombas inteligentes, que nos permiten barrer el mapa cuando nos vemos demasiado agobiados. O para usar la habilidad de impulso, que nos permitirá hacer un movimiento rápido para escabullirnos de los momentos concurridos, siempre, claro, que hayamos desbloqueado antes dicha habilidad.
El sistema de mejoras es uno de los mayores aciertos de Ultratron, le da un toque estratégico realmente interesante, que lo hace más profundo, divertido y rejugable. La primera reacción después de completar por primera vez las fases de «historia» es la de volver a empezar de nuevo para seguir un progreso distinto en el sistema de mejoras. Conforme vamos eliminando a los enemigos no solo conseguimos puntos para mejorar nuestra clasificación, sino que aparecen unas bolitas que nos cuentan como dinero o experiencia, con la que podremos más tarde, entre cada fase, elegir qué mejoras queremos comprar o potenciar. Algunas de estas mejores serán básicas como el escudo, del que deberemos mantener siempre algunas rayitas (con cada raya que queramos acumular aumentará su coste); o las bombas inteligentes, de las que siempre es buena idea tener una o dos acumuladas por si las cosas se ponen demasiado complicadas hacer un barrido rápido. Pero luego, podremos adquirir y mejorar, entre otras cosas, una capacidad de impulso, desbloquear granadas; o conseguir hasta tres drones mascota que nos acompañen en pantalla, y que también podremos mejorar.
El objetivo será sobrevivir a las 40 primeras fases, y acabar con los cuatro robots gigantes jefes del apocalipsis que irán apareciendo cada 10 fases. Aunque luego podremos continuar superando fases tanto como seamos capaces. De hecho, Ultratrón nos insta a que intentemos llegar lo más lejos posible con una clasificación online, en la que quedan registradas las mejores puntuaciones y el puesto que ocupa cada jugador.
Comos hemos dicho, cada 10 fases tendremos que enfrentarnos a un boss. Aunque, a cambio, obtendremos un checkpoint que nos permitirá continuar en la fase siguiente al boss en el caso de que nos maten. No solo eso, sino que estos checkpoints se quedan registrados, por lo que si queremos volver a un checkpoint anterior podemos hacerlo. Eso es especialmente útil si queremos cambiar de estrategia y comenzar a gastar nuestros puntos de experiencia en otras mejoras que nos puedan poner las cosas más fáciles en el futuro, o incluso que nos permitan aumentar la experiencia conseguida (hay una mejora para la recogida de las bolitas de experiencia). Por tanto, si continuamos jugando una vez completadas las primeras 40 fases, poco a poco iremos consiguiendo más mejoras, un requisito indispensable para continuar avanzando, ya que el juego cada vez se va incrementando su velocidad. Por lo que es imprescindible que seamos capaces de acabar con los enemigos rápidamente. El juego así poco a poco se va tornando más frenético, y llega a hacerse realmente divertido. Este es uno de los puntos más sólidos del juego. Ya que tratándose de un arcade como es, toma aún así un componente estratégico que lo hace muy interesante, y que aumenta de manera considerable su profundidad. Además, se agradece el añadido del cooperativo, que aunque solo sea a nivel local, nos permite compartir el juego con algún amigo y pasar un rato disparando en compañía.
Aunque también tiene sus puntos flacos. Por muchos niveles que superemos solo nos encontraremos con cuatro o cinco variantes de enemigos y los mismos cuatros jefes finales, aunque después de las primeras veces aparecerán juntos en pantalla para complicar un poco las cosas. En cualquier caso, la poca variedad de enemigos hace que cada fase sea prácticamente igual, a excepción de las fases de bonus y de asalto. Las primeras aparecen cada tres o cuatro fases, y pueden consistir en esquivar o en acabar con todos los enemigos. Las segundas, aparecen una o dos veces cada diez fases, y en ellas aparece una gran cantidad de enemigos por los cuatro costados. Por otro lado, la arena en la que combatimos es siempre el mismo cuardradito negro en el centro de la pantalla, y no añade ningún tipo de efecto al combate.
Muy colorido y muy confuso
En esta «remasterización» de Robotron, se ha hecho una puesta a punto también, como es obvio, del apartado técnico. Lo que no quiere decir que se haya roto la estética retro. Muy al contrario, Ultratron se muestra orgulloso de esa estética retro, pixelada y colorida de la que hace gala. Resulta, por eso mismo, algo complicado valorar este apartado. Por un lado, jugar a Ultratron puede resultar muy confuso, más aún cuando alcanzamos las fases más altas en las que se empiezan a acumular enemigos, proyectiles, explosiones, y todo más rápido. Es complicado de distinguir nuestros disparos de los de los enemigos. Es difícil distinguir algunos disparos de los enemigos de las bolitas de experiencia. Y además con las explosiones todos los colores se entremezclan durante un momento donde tienen lugar, algo parecido ocurre cuando recogemos de sopetón mucha experiencia.
Sin embargo, Ultratron toma su apartado técnico como un componente más de su jugabilidad. Esa confusión que se crea en pantalla es parte de su puesta en escena. La sensación de no saber muy bien donde están los enemigos, disparar hacia todas partes y guiarte muchas veces más por los colores que por las figuras es un elemento esencial de ese frenetismo en la acción del que presume. No sería del todo justo achacárselo como un punto negativo, porque su apartado técnico no entorpece la experiencia de juego, sino que es una parte esencial de la misma.
Con respecto al resto de su apartado técnico, los efectos de sonidos y la música que acompaña la acción siguen esa estética retro, y prolonga esa sensación añeja. Además, Ultratron llega traducido al español. Aunque no existen voces y son pocos los textos que hay, se agradece la traducción, que para aquellos que no dominen el inglés será útil sobre todo a la hora de elegir qué mejoras potenciar. Los demás textos que aparecen son algunas indicaciones y consejos mientras jugamos, pero difícilmente se le prestará alguna atención a estos, porque mientras aparecen tenemos que estas disparando.
Conclusión
Ultratron es ante todo un juego divertido, cuyas premisas son la acción frenética y sencilla con un toque retro. Más allá de sus defectos, su acierto es ese, entretener. Y queda asegurado que mientras dure la partida no apartaremos la vista de la pantalla, y solo tendremos una pausa a la hora de elegir entre las distintas mejoras. Hará las delicias de los más nostálgicos y de aquellos que busquen un juego con el que pasar un rato divertido de vez en cuando. Tampoco le vamos a pedir mucho más.
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Lo bueno
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- Acción constante y frenética
- Sistema de mejoras
- Se agradece el añadido del cooperativo
- Aspecto visual retro y colorido…
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Lo malo
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- …que crea momentos de confusión
- Poca variedad de enemigos y jefes finales
- El componente online es anecdótico
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