Lo hemos esperado durante mucho tiempo. No se ha mostrado hasta casi el final, pero por fin hemos jugado a la campaña de Star Wars Battlefront II. Tras jugar recientemente un par de horas a la campaña de Star Wars Battlefront II, os contamos nuestras impresiones y un pequeño avance de lo que supondrá este nuevo capítulo de una de las sagas más laureadas y queridas de todos los tiempos tanto en videojuegos como en la gran y pequeña pantalla.
Antes de nada, hay que recordar que Star Wars Battlefront II llegará a Xbox One, PS4 y PC (con mejoras para Xbox One X) el próximo 17 de noviembre, poco antes del estreno de la octava película de la saga. A diferencia del Star Wars original, Star Wars Battlefront II contará con varios modos que están desarrollando diferentes estudios internos de Electronic Arts. Criterion, los creadores de Burnout, se están encargando del modo de batallas espaciales. DICE, los autores de Battlefield, están creando el multijugador »terrestre» y EA Motive es el estudio encargado de la campaña.
El lado oscuro
EA Motive es un estudio de Electronic Arts creado expresamente para Jade Raymond, una de las responsables del primer Assassin’s Creed. Raymond salió de Ubisoft y se fue a EA para crear el modo campaña de Star Wars. Sobre sus hombros hay una gran responsabilidad. Y es que, la historia de Star Wars Battlefrond II es canon, lo que significa que lo que nos cuenten en este videojuego tendrá validez »oficial» de cara a lo que es el universo creado por George Lucas. Ahora bien, ¿de qué va la campaña?
Star Wars Battlefront 2005 vs 2017, ¿cuánto han avanzado los gráficos?
Como ya sabéis, ya que se ha hablado mucho sobre esto, la campaña de Star Wars Battlefrond II nos pondrá al mando de Iden Versio, una soldado imperial de alto rango que lidera el Escuadrón Inferno. Se trata de un grupo de operaciones especiales del Imperio que sólo se presenta en el campo de batalla cuando las cosas van mal. Tienen su propia nave (con una estética muy similar al diseño de las naves de la nueva trilogía) y son especialistas en desbaratar operaciones enemigas en un abrir y cerrar de ojos. Hablando de la nueva trilogía, la campaña de Star Wars Battlefront II trascurre justo al final de El Retorno del Jedi y se alargará hasta el comienzo de El Despertar de la Fuerza. Por tanto, será el punto de unión entre la primera y la tercera trilogía.
El Escuadrón Inferno
Tres soldados, que hayamos visto, son los componentes del Escuadrón Inferno. Versio, Meeko y Hask son soldados de élite que visten un traje de stormtrooper (aunque con diferente botonera en el pecho) totalmente negro, algo que los asemeja a los pilotos de TIE. Eso sí, cuentan con un pequeño droide a la espalda que tendrá mucha importancia durante la campaña. Y es que, este droide es una especie de navaja suiza que nos sacará de más de un apuro.
Los tres niveles que hemos podido jugar se ambientan en una nave rebelde, en Endor durante la destrucción de la Estrella de la Muerte y en el espacio aéreo de Fondor. Las tres misiones cuentan con mecánicas muy diferentes y, mientras una nos pone en la piel de una Versio desarmada que tiene que usar el sigilo para sobrevivir, la otra nos ofrece un arsenal amplio con el que combatir a la resistencia en Endor. Por último, en Fondor pudimos controlar un TIE para volver a saborear lo que haremos a menudo en el multijugador.
Sí, es Kanata.
Lo más interesante de esta prueba de la campaña de Star Wars Battlefront II es, quizá, el uso del sigilo. Aquí es donde entra en juego el pequeño droide que nos acompaña en cada momento, ya que podremos realizar descargas eléctricas con él, mandarlo a por un enemigo mientras nosotros acabamos con otro y, además, personalizar sus características con diferentes cartas para hacerlo más letal o válido a la hora de protegernos frente ataques enemigos.
Por defecto, el droide sirve como radar para detectar enemigos y para utilizar el mencionado electroshock para aturdir. Sin embargo, también se podrá mejorar mediante cartas. Por ejemplo, logré una habilidad que le permite crear un escudo de fuerza alrededor de Versio para proteger a la comandante. Las propias habilidades de Iden se podrán mejorar gracias al uso de cartas, pero es algo sobre lo que tendremos que profundizar más durante el análisis del juego.
Lo que está claro es que la campaña promete ser variada en cuanto a mecánicas y habrá alguna que otra sorpresa. A nosotros nos contaron algunas, pero son spoilers bastante gordos (gajes del oficio) que preferimos no revelar.
Frostbite es de otra galaxia
Sin embargo, en lo primero que nos fijamos (y vosotros también lo haréis) fue en el espectacular apartado visual de Star Wars Battlefront II. El primero sorprendió por unos gráficos hiper realistas y esta secuela mejora todo lo visto entonces. No es revolucionario, pero sí se pulen todos los aspectos que hace unos años podían chirriar, como los jaggies y algunas texturas. Sí, Frostbite en las manos adecuadas sigue siendo un portento que nos permite disfrutar de unas escenas cinemáticas apabullantes y una calidad ingame para quitarse el sombrero.
Todo es puro Star Wars, desde el colorido hasta de las estancias más oscuras hasta los disparos de los blasters que impactan con las superficies ocasionando que salten chispas. Todo se ve como se tiene que ver, pero lo más impresionante, además de detalles como lo conseguidos que están los modelados y animaciones (los stormtroopers y rebeldes mueren muy bien y de forma natural) es la iluminación en planetas con vegetación como Endor. El sonido, como no podía ser de otra forma, raya el excelente y, aunque lo que jugamos estaba en inglés con textos en castellano, el juego final sí llegará con voces en nuestro idioma.
Prometedor
El juego, según nos confirmó Motive, tendrá »algunos capítulos más» que los tres que pudimos probar, algo realmente obvio, pero que no nos dio ninguna pista sobre la duración de la campaña. De momento, lo que hemos jugado es prometedor, ya que el espíritu Star Wars está ahí y es muy espectacular. Está la intención de crear un capítulo canónico, pero hay que esperar a ver lo lejos que va el estudio a la hora de crear una historia nexo entre la primera y la tercera trilogía y, sobre todo, si tiene chicha o es simple relleno.