Recientemente se hizo saber que DIRT Rally iba a ejecutarse de una forma muy peculiar en Xbox One y Playstation 4, habiendo logrado mantener estable su tasa de frames a costa del uso de cambios de resolución dinámicos. Sin embargo, desde Codemasters insisten en que su ambición es alcanzar que la tasa de frames no varíe mientras la resolución se mantiene inalterable. Es un objetivo que podría ser demasiado difícil de alcanzar, pero desde Codemasters no cesan en su empeño, tal como ha asegurado Paul Coleman, Jefe de Diseño, en una entrevista al portal Videogamer.
Y es que este empeño no sería posible si en realidad el objetivo no fuese factible, asegurando que «estamos muy cerca de lograr este objetivo», refiriéndose a Playstation 4, asegurando que «hay algo más de trabajo en Xbox One». Según indica «resulta más complicado conseguir que se vea suave», no obstante «no decimos que no lo vayamos a intentar. Vamos a hacer lo que se pueda». El objetivo es que el juego pueda moverse a 1080p y 60fps, pero tienen claro que de tener que renunciar a algo, será a la resolución, lo cual, es la mejor opción.
En cierto modo, la situación es complicada, porque la carga de trabajo que tienen los hardwares no es constante, y es precisamente por esto que la resolución sería dinámica, aplicando una reducción en aquellos escenarios en los que el juego corre el riesgo de perder fluidez. En el caso de Xbox One, la reducción a 900p en algunos escenarios es necesaria, porque lo que se pretende garantizar es que corra a 60fps. Tras confirmarse este aspecto, Codemaster no ha aparcado el problema, e insistirá en lograr que Xbox One y Playstation 4 puedan mantener la resolución en todo momento.
Tienen hasta el 6 de abril para conseguirlo, fecha en la que DIRT Rally verá la luz en ambas consolas, si bien, conocemos bien las nuevas tendencias que podrían hacer llegar esta mejora vía actualización, y con la vista puesta en la llegada de DX12, quien sabe si algún día podrían recuperar esa desventaja.