Tras ser confirmado para llegar a Xbox One, Elite: Dangerous es noticia nuevamente para descartar que vaya a hacer uso de una de las nuevas opciones que albergará Xbox One en el futuro, el juego cruzado entre plataformas. En cierto modo, el estudio parece haber descartado esta opción en cualquier variante, de modo que los usuarios de PC, Playstation 4 o Xbox One no podrán competir entre sí en ningún caso, pese a que compartirán servidores.
Aunque la idea gusta a Frontier Development, según ha explicado el máximo responsable, David Braven, no es viable. La implicación en el proyecto, no obstante, exigirá al equipo a mantener actualizada una experiencia que promete diversidad, y es precisamente esta tendencia la que habría puesto en jaque la opción. «La verdad es que me gusta el cross-play, creo que sería un desafío para nosotros, pero hemos dicho que queremos crear actualizaciones para todas las plataformas y no deseamos que las actualizaciones se vean retrasadas en PC o cualquier otra plataforma», asegura Braven.
Obviamente, tener varias lineas de desarrollo separadas descordinaría esta constante actualización del producto, que en caso de hacer frente a un cross-play, generaría más problemas que soluciones. Aunque todos se vean inmersos en una experiencia común, estando expuestos a una misma ambientación y cambios generales, como los precios del mercado o la situación política. Pese a que los usuarios permanezcan en el mismo servidor, no se verán físicamente, es precisamente este aspecto lo que desconcierta, pero la realidad es que según explica, «esta opción está fuera de nuestro alcance ahora mismo».
Previsto para la segunda mitad del año, Elite: Dangerous verá la luz en PC, Playstation 4 y, como no, Xbox One.