Ya hemos jugado a State of Decay 2 en Xbox One X, el nuevo juego de Undead Labs y uno de los más importantes del panorama de títulos first party de Microsoft para este año. La semana pasada pudimos asistir a un exclusivo evento preview en Londres en el que estaban disponibles las versiones de Xbox One X y Windows 10 de la esperada secuela del juego de muertos vivientes y supervivencia.
Pudimos pasar unas tres horas con el mando entre las manos y, con todo lo que nos trajimos del viaje, gameplay incluido, hemos traído la mochila cargada con las impresiones de State of Decay 2. Sin embargo, una ocasión tan especial merecía un trabajo menos convencional del que solemos realizar. Aprovechando que teníamos tres horas de vídeo capturado por nosotros mismos, hemos decidido hacer unas impresiones con gameplay en las que resumimos nuestra experiencia con todo lo que nos encontramos en el juego durante nuestra sesión.
La mayor carga de las impresiones de State of Decay 2 está incluida en el vídeo que os dejamos a continuación:
Aunque el desarrollo y lanzamiento de juegos independientes en la actualidad esté más que aceptado, y sea la fuente de entretenimiento de muchos jugones gracias a los valores que grandes producciones no pueden permitirse, en épocas anteriores no era así. Y menos en consola. Uno de los grandes méritos de la generación pasada y de Microsoft en particular fue el apoyo al desarrollo independiente, no con dinero, sino con la creación de herramientas de desarrollo y plataformas para dar visibilidad a los juegos indie.
Y particularizamos en Microsoft ya que, aunque a comienzos de la actual generación se giraron las tornas, los de Redmond son los que propiciaron el desarrollo de juegos indie en consolas gracias a Xbox Live Arcade. Puede que ya no lo recordéis, ya que la Store se ha unificado, pero Arcade era el lugar en el que podíamos encontrar algunos de los mejores juegos de la generación pasada, y eso es decir mucho.
Braid, Limbo o Mark of the Ninja son solo tres nombres de la extensa lista de juegos independientes que crearon estudios que, en la actualidad, se han ganado un nombre y que empezaron, en su mayoría, el camino en la plataforma indie de Xbox 360. Uno de los que llegó más tarde, pero no por ello con menos ruido a su alrededor, fue State of Decay. Jeff Strain, ex de Blizzard, fundó el estudio en Seattle y nos asombró con un juego de zombis muy particular.
Y es que, State of Decay se alejaba de la acción como elemento protagonista para proponer mecánicas de supervivencia, de gestión de grupo y de creación de comunidades donde poder vivir. Esta idea, muy similar a lo que podemos ver en The Walking Dead y alejada de la propuesta descerebrada de Dead Rising o películas como El amanecer de los muertos, logró cautivar a más de un millón de jugadores, algo fantástico para un juego independiente en formato digital en solo una consola. Un año después, también con las copias de PC, sobrepasaron los dos millones.
Sin embargo, el estudio no las tenía todas consigo, ya que había una buena parte de la comunidad que se sentía decepcionada por no incluir, finalmente, un modo multijugador para State of Decay. El propio Strain salió a la palestra a comunicar que el modo cooperativo les llevaría más tiempo del previsto inicialmente, algo que afectaría al desarrollo del DLC, futuras versiones del juego (la que más tarde llegó a Xbox One) y la secuela. Eso sí, afirmó que el multijugador sería el corazón de un nuevo juego, y en esas estamos.
El multijugador de State of Decay 2
En el E3 de 2016, durante la conferencia de Microsoft, Undead Labs mostró el primer tráiler cinemático de State of Decay 2 en el que, además de las mecánicas ya conocidas del primer juego, como la gestión y creación de refugios, dejaba claro que el multijugador iba a ser una parte importante de la experiencia. »Nadie sobrevive solo», ese fue la consigna del tráiler y es algo que se aplica al juego en general, no solo al apartado multijugador. Vayamos por partes en esto.
En las impresiones de State of Decay 2 que os hemos dejado más arriba se puede ver que durante el juego en solitario nos acompañan otros supervivientes. Esto es algo que ya conocíamos del primer juego, pero que ahora se potencia gracias a la que parece ser una mejor inteligencia artificial y, sobre todo, a la sensación de mayor preocupación por tus supervivientes. Podemos ir a la base las veces que queramos para que nuestro personaje descanse y que otro tome el relevo, cada uno con su equipo (que se puede editar) y sus habilidades, pero no hace falta ir al campamento para que otros personajes se unan a nuestra causa.
A medida que completamos misiones y hacemos encargos, diferentes supervivientes, que no necesariamente son de nuestro grupo, nos echan una mano y, ciertamente, la IA no se comporta nada mal. Claro está, hay un modo multijugador que, en este caso, es totalmente independiente del modo en solitario y cuya única conexión son los objetos que se transfieren de la partida multijugador a la partida offline.
El multijugador de State of Decay nos anima a entrar a la partida de otro jugador, o invitar a otros tres jugadores a la nuestra. El jugador que haga de anfitrión, el host, juega en el mapa en el que ya se encontraba y, los demás, se irán de su mapa para entrar en el del host. Una vez ahí, los »invitados» a la partida empezarán a cumplir misiones del mapa del host. Y, además, este anfitrión es el absoluto protagonista. Y es que, como se puede ver en el vídeo, no podemos alejarnos demasiado de el, o viajaremos mediante »respawn» a su lado.
Es decir, la experiencia cooperativa está diseñada para que los cuatro jugadores vayamos relativamente juntos, cumpliendo misiones y consiguiendo recursos tanto para el anfitrión, como para nosotros. Algo que no sabemos aún, por lo que habrá que esperar al análisis, es si podemos cambiar de mapa todos juntos y empezar una nueva comunidad de cero. Uno de los puntos que más curiosidad nos suscitó en el viaje es la gestión del multijugador y, afortunadamente, ya sabemos cómo será.
Esto quiere decir que, si queréis jugar con amigos, podréis hacerlo en un modo multijugador muy clásico, pero como no es un mundo interconectado ni »siempre online», como otros juegos que hemos recibido recientemente, los jugadores que queráis disfrutar de una experiencia más tradicional y más de »supervivencia», también podréis hacerlo sin miedo a que nadie os invada. Eso sí, lo que no habría estado mal es que el mapa fuera único, sin diferentes zonas completamente separadas unas de otras, para que lo que completemos en multijugador también se nos complete cuando jugamos en solitario. Pero, al final, Undead Labs es lo que es.
Un estudio indie con una gran responsabilidad
En cierto modo, State of Decay 2 recuerda mucho a lo que ocurrió con No Man’s Sky en PS4 (y que ahora llegará a Xbox One). Se trata de un juego independiente que debe llenar el hueco de una gran producción, y eso no es sencillo. Y es que, puede que se esté esperando de State of Decay 2 mucho más de lo que, en realidad, es. Ahora bien, esto no es negativo, ni mucho menos. El juego es completamente honesto y, a nivel de marketing, ha ido mucho más por la línea del primero, con una promoción modesta y más material lanzado estas últimas semanas, que por el rimbombante marketing del juego de Hello Games.
State of Decay 2 no engaña a nadie, es un juego que sigue a pies juntillas los pasos del primero y que es capaz de ofrecer elementos más pulidos que el original o que van un paso más allá, como el multijugador, pero que sigue siendo un juego modesto obra de un estudio que no tiene los recursos de los grandes first party de Microsoft, y eso se nota.
Como digo durante las impresiones de State of Decay 2 en vídeo, hay que esperar al lanzamiento del juego para poder valorarlo en su versión final, pero a priori gustará a todos los que disfrutaran con la primera entrega, además de a los amantes del género de la supervivencia gracias a sus mecánicas de búsqueda de recursos y supervivientes, a la tensión que aportan las hordas de zombis, el combustible finito de los vehículos y al caótico mundo posapocalíptico que han creado en Undead Labs.
El 22 de mayo estará entre nosotros y, como ya sabéis,s e trata de un juego que llegará de inicio a Game Pass y será Xbox Play Anywhere.