Gearbox es una compañía que se pasa tanto tiempo en los juzgados como desarrollando videojuegos, una compañía que se ha visto envuelta en la polémica de Alien Colonial Marines y en otra debido a los derechos de la saga Duke Nukem, saga que podría tener una nueva entrega tras el decepcionante Duke Nukem Forever.
Todo empezó cuando Interceptor y 3D Realms empezaron a desarrollar un juego de acción con vista cenital bautizado como Duke Nukem Mass Destruction, juego que fue denunciado por Gearbox debido al uso del nombre Duke Nukem y que finalmente ha terminado siendo Bombshell. Tras un largo litigio, las tres compañías han llegado a un acuerdo, como leemos en la web de Gearbox, en el que, básicamente, 3D Realms declara que nunca han querido hacer daño a la saga Duke Nukem ni a Gearbox y que una sola casa para una IP es lo mejor, por lo que no pueden esperar a qué será lo próximo que hará Gearbox con ‘El Rey’.
Yo también tengo bastantes ganas de ver un nuevo Duke Nukem, algo que supongo se acelerará debido a la finalización del conflicto.