Muchos se enternecen cuando comprueban que las relaciones de amor llegan a buen puerto, y en cierto modo la relación entre Platinum Games y Microsoft viene de lejos o, al menos, es lo que ha dejado entrever Jean Pierre Kellams a través de una entrevista concedida al portal Dualshockers. El productor creativo de Platinum Games ha declarado que la relación con Microsoft siempre ha sido buena y «durante años, hemos intentado hablar con ellos sobre proyectos que podría elaborar juntos», ya que «siempre hemos intentado encontrar la forma de trabajar juntos». Es precisamente este sentimiento lo que habría originado el acuerdo por el que Scalebound llegará como una exclusiva a Xbox One.
De hecho, Scalebound no es un producto que haya salido de la nada, era un proyecto que rondaba las cabezas de los creativos desde que produjeron Bayonetta, un título que ya mostró su predilección por la marca Xbox, al ser un juego que rendía de forma superior en esta. Tal como declara Kellams, «queremos mucho a Xbox», donde «Bayonetta era un juego para Xbox 360». De hecho, según comenta «siempre hemos querido trabajar con Microsoft y fue cuando terminamos The Wonderful 101 cuando conseguimos volver a sentarnos», en una negociación de la que conocemos el resultado, un nuevo título exclusivo, Scalebound.
Claro que la idea de Scalebound pertenece, en verdad, a Hideki Kamiya, que ya vimos en la pasada Gamescom, y pese a que se preveía que este título fuese presentado antes, finalmente tuvo su oportunidad. Claro que, el proyecto viene de lejos, tal como da a conocer el creativo, Microsoft les propuso algo grande para un nuevo hardware, el que se corresponde a Xbox One, a partir del cual «había que trabajar de forma conjunta» para lo que se preguntaron «¿Hay algo suficientemente grande y retante como para comenzar a trabajar juntos?». La respuesta parece evidente, Scalebound se convirtió en el proyecto que uniría las fuerzas de Microsoft y Platinum Games, ya que, «cuando les mostramos Scalebound, creyeron en el proyecto y comenzamos a trabajar en el», hace dos años.
De este modo, una historia de amor entre estas empresas parece tener su fruto, en forma de un título ambicioso, original y atractivo, que parece bien enfocado para atraer al, siempre escéptico, público japonés, sin descuidar al exigente público occidental. Scalebound todavía tiene mucho que mostrar, de modo que no se puede adelantar una fecha de lanzamiento, tal siquiera aproximadamente, aunque apunten a día de hoy, como una de las bazas exclusivas de 2016 para Xbox One.