Kingdom Come Deliverance 2 se lanzará el próximo 4 de febrero, ofreciendo un RPG de mundo abierto profundamente realista. Si bien la secuela continúa los eventos del juego original de 2018, a muchos jugadores les surge la pregunta: ¿es necesario jugar el primer título para disfrutar plenamente de esta nueva entrega? Vamos a responder esta duda.
¿Es Kingdom Come Deliverance 2 una secuela directa?
Sí, Kingdom Come Deliverance 2 es una secuela directa. La historia comienza poco después del final del primer juego, manteniendo al mismo protagonista y ubicándose en el mismo mundo. Esto podría hacer que los nuevos jugadores se preocupen por perderse detalles importantes de la trama.
¿Es necesario jugar al primer Kingdom Come Deliverance?
No necesariamente. Warhorse Studios ha diseñado el juego de manera que sea accesible para quienes no han jugado la primera entrega. La secuela incluye un prólogo que resume los eventos del juego anterior, presentando de forma orgánica los sucesos clave. Durante las primeras horas de juego, se ofrecen flashbacks y conversaciones que permiten a los jugadores ponerse al día con la trama y el universo del juego. Además, tendrás la opción de tomar decisiones sobre lo que ocurrió en la historia previa, algo que facilita la transición para nuevos jugadores.
Por supuesto, jugar el primer título ofrece una comprensión más profunda de los personajes y el contexto histórico, pero no es imprescindible para disfrutar de Kingdom Come Deliverance 2. Aunque el protagonista, Henry de Skalitz, es ficticio, muchos eventos, lugares y figuras históricas representados en el juego son reales. Warhorse Studios trabajó con expertos para recrear con precisión la época medieval, brindando un entorno auténtico y lleno de detalles históricos.
En definitiva, si eres nuevo en la saga, Kingdom Come Deliverance 2 es perfectamente jugable y disfrutable por sí solo. No obstante, explorar la primera entrega enriquecerá tu experiencia y te conectará más profundamente con el mundo y los personajes de esta aclamada franquicia.