Hablar de tecnología en estos tiempos es hablar del uso de la IA, incluso en el ámbito de los videojuegos. Hemos visto cómo algunas empresas comienzan a ver ventajas en su aplicación y Microsoft está en el meollo. De hecho, nuevas especulaciones sobre la siguiente generación de Xbox, exponen el uso de una tecnología presentada como IA Accelerator para múltiples procesos que puedan mejorar el rendimiento del hardware.
La información llegaría como parte de un artículo publicado por Jez Corden en Windows Central, donde abarca cuestiones de tecnología que, en su momento, iban dirigidas a la división de dispositivos móviles. No obstante, fuentes fiables habrían expuesto la posibilidad de aplicar esta tecnología en la próxima generación de Xbox.
La siguiente generación de Xbox implementaría el uso de Inteligencia Artificial a través de una unidad de procesamiento propia
Más concretamente, expone que la próxima consola de Microsoft contaría con el IA Accelerator para manejar tareas de IA. Suena muy a Perogrullo, no obstante, se amplía la inforamción asegurando que incluiría una unidad de procesamiento neuronal, o NPU. Esta unidad, que iría en el próximo hardware, se encargaría de realizar algunas tareas propias de una Inteligencia Artificial, como sería «manejar algunas tareas de IA, como la súper resolución automática, por ejemplo, sin restar valor a la CPU o GPU». Digamos que esto es lo que vendrían desarrollando para crear esa herramienta similar a la que Nvidia o AMD, aplican con el DLSS o el FSR, respectivamente.
Entre los detalles que ha desvelado, aunque posteriormente lo ha querido desmentir, la unidad de procesamiento que cita, podía ser desarrollada por Qualcomm. Pero el propio periodista ha reconocido que todavía no se sabe con certeza quién se encargaría de fabricarlo. De hecho, asume que lo más probable es que la unidad proceda de AMD, como se espera que sea el resto de los componentes de esa futura consola de Xbox.
Del mismo modo, recalca la posibilidad de que la propia interfaz de usuario tenga integrado un sistema similar al que se implementa en Windows 11, que conocemos como Copilot. Este sistema, impulsado por IA, ofrecerá soporte al jugador en diferentes ámbitos. Ahí encontramos información que surgió hace ya un tiempo, donde incluso se exponía la opción de tener una interacción más natural con ese entorno que sirviera a los jugadores para mejorar su experiencia.
Recordemos, que recientemente se dio a conocer que existe un plan para que Xbox abarque una manera de hacer sus consolas diferente. Mostrar un camino que cualquier fabricante pueda usar para crear su propio modelo. Es algo que resulta curioso, sobre todo, por que ese mismo planteamiento llegaría hace años de la mano de Steam con las Steam Machines. Un modelo que no funcionó en su momento, pero que hoy día podría llegar a contemplarse como una opción viable.
Sea como fuere, resulta interesante que en lugar de estar especulando con especificaciones técnicas para avalar una experiencia gráfica o un montón de TeraFlops y cosas de esas, se esté mirando al futuro con otro tipo de visión. El uso de IA parece ser algo que puede resultar realmente importante, tanto por parte de la ejecución de juegos, como por su desarrollo. Las tecnologías actuales están empezando a comprender todo lo que la IA es capaz de ofrecer, aunque en estos momentos su uso sea limitado en el ámbito de usuario.
La cuestión a resolver en este caso es saber cuándo se pretende dar ese paso a una nueva generación de consolas. La actual ha tardado mucho en dar los pasos que ofrezcan una experiencia de mejora notable, dadas las circunstancias. Incluso, da la sensación de que no se logra obtener lo prometido, de no ser por la aplicación de algunas tecnologías que compensen unos desarrollos demasiado largos y costosos. La industria sufre de retrasos, cancelaciones y cierres, como es el último caso de Take Two, por cuestiones de esta índole, mientras se aguarda con impaciencia un relevo generacional que no iba a ponerle las cosas más fáciles ahora mismo.
Aunque la competencia parece apretar, lo cierto es que las incertidumbres y el exceso de rumores solo pueden compensarse con paciencia para esperar el día en que todo se haga oficial.
