Tras celebrar su 10º aniversario, Platinum Games ha ofrecido una ronda de entrevistas a diferentes medios en los que ha mostrado su perspectiva de futuro y ha premiado los logros obtenidos en el pasado. Platinum Games se ha convertido en una de esas editoras que está trabajando constantemente en hacer llegar experiencias únicas, novedades a un catálogo repleto de licencias que se repiten, compitiendo seriamente con estas. Actualmente, a la expectativa de la llegada del nuevo juego de las Tortugas Ninja, Teenage Mutant Ninja Turtles: Mutants in Manhattan, así como comprobada la calidad de un título con muchos conceptos originales, en Transformers Devastation, muchos siguen echando en falta el regreso de juegos como Bayonetta, entre otros.
Y en cierto modo, desde Platinum Games han dado a entender que es cierto que no se puede basar el éxito siempre en la producción de nuevos juegos, de nuevas IP, y que recuperar licencias de éxito con secuelas puede ser mucho más beneficioso para ellos. Tatsuya Minami, responsable de la compañía, ha compartido impresiones en Famitsu, donde ha declarado que empezaron a construir juegos con la intención de «ser un estudio que solo hiciera videojuegos 100% originales», no obstante «esa mecánica de trabajo resulta tremendamente dificil», de modo que «nos centramos en hacer obras de perfiles muy variados».
Hasta la fecha, Platinum Games ha conseguido consagrarse como un estudio con buenas ideas, obteniendo en muchas ocasiones una total libertad a la hora de construir sus juegos. Según declara el director del estudio, Eiro Shirahama, suelen encontrarse con «total libertad para hacer lo que queramos en las partes de acción», con lo que considera que «tenemos una gran libertad en términos de desarrollo».
No sabemos si estas declaraciones pueden estar sugiriendo un posible retorno de alguna de esas licencias que muchos esperan ver nuevamente en la actualidad, como es el caso de Bayonetta. Sin embargo, ahora mismo, en la comunidad de Xbox, lo que se busca es que concreten nuevos detalles de Scalebound, un título que no ha dado muchas alegrías últimamente, sobre todo, por su retraso a 2017.