Star Wars es una de las sagas más importantes que existen en la actualidad, y aunque en su vertiente cinematográfica no atraviesa su mejor momento, lo cierto es que los fans de los videojuegos no podríamos estar más contentos con sus últimas obras. Tras disfrutar de encarnar la piel de un Jedi como Cal Kestis en Star Wars Jedi: Fallen Order y Star Wars Jedi: Survivor, Ubisoft pretende quitarle el título del mejor juego de la franquicia de la década a Electronic Arts con Star Wars Outlaws.
Aunque fue anunciado casi por sorpresa, el juego desarrollado por Massive Entertainment, padres de The Division, llegará a nuestras consolas este mismo mes de agosto, y gracias a Ubisoft he tenido la posibilidad de jugar al título durante un buen puñado de horas. Por eso, y si andáis algo preocupados por el estado del juego tras los últimos vídeos que han aparecido, a continuación os diré como han sido mis impresiones de Star Wars Outlaws.
Impresiones de Star Wars Outlaws
Esto se respira a Guerra de las Galaxias
En los últimos años se ha hablado mucho de que los trabajos de Ubisoft son copias idénticas que simplemente cambian la skin del juego del que se trate. Lo cierto es que, aunque es algo que puede aplicar a algunos proyectos del estudio, no es algo que pueda compartir con esta obra. Star Wars Outlaws desprende un aroma a la obra de George Lucas por los cuatro costados. Todo lo que tuve la oportunidad de ver en pantalla parecía formar parte de la obra original del conocido cineasta, con una ambientación que perfectamente podría formar parte de las películas de los 80.
Y es que, precisamente, la historia de Star Wars Outlaws tiene lugar en la misma línea temporal que las películas originales. Concretamente, los sucesos del juego ocurren entre ‘El Imperio contraataca’ y ‘El retorno del Jedi’, lo que no solo nos permitirá ver algunas de las localizaciones más emblemáticas de la saga, sino que también podremos tener contacto con algunos de los personajes más importantes de la misma. No obstante, durante el tiempo que estuve a los mandos, aunque se hacía mención a varios de estos personajes, lo cierto es que todo lo que pude ver respondía a personajes completamente nuevos.
En la demostración que tuve la oportunidad de probar, visité lugares como Toshara, una base espacial y un planeta helado llamado Kijimi. En todos ellos no solo es que se haya acertado de pleno con la ambientación, sino que se respira vida en cada rincón, algo que será de crucial importancia para un juego que se espera que sea tan grande como Star Wars Outlaws.
Un universo vivo y de grandes dimensiones
Siempre dicen que quien avisa no es traidor, y esto se podría aplicar perfectamente a este caso con Ubisoft. El director creativo del juego, Julian Gerighty, ya dijo en su día que cada planeta de Star Wars Outlaws tendría un tamaño bastante grande. Como es lógico, esto generó dudas, y no solo por esa moda de hacer cada vez los mundos más grandes, sino porque al final todo quedara reducido a un mundo soso y vacío. Esto no ocurre en Star Wars Outlaws. Toshara fue el único planeta (es una luna en realidad) donde gocé de plena libertad, y lo cierto es que lo que pude ver es que se ha puesto empeño en demostrar que hay vida en él, especialmente en sus ciudades. Todo está repleto de NPCs de diferentes especies, lo que permite tener esa sensación de estar realmente en el universo de Star Wars.
En estas ciudades podemos encontrar todo tipo de cosas que hacer. De hecho, una gran parte del tiempo de la demostración estuve entre las “murallas” de la ciudad de Mirogana. Es aquí donde podemos ver la importancia que tendrán los diferentes sindicatos en la historia. En el caso de la capital de Toshara, podemos ver como existen 4 partes diferenciadas: una general, y una para cada uno de los 3 sindicatos que hay en la ciudad: Pyke Syndicate, Crimson Dawn y Hutt Cartel. Dependiendo de la relación que tenía con cada uno de ellos, pude pasear tranquilamente por las calles que estén bajo sus dominios, o tener que esconderme para evitar ser abatido. Lo cierto es que le da un toque que me pareció muy interesante, ya que hay ocasiones en las que el sistema de reputación no tiene ningún efecto real. En Star Wars Outlaws sí lo tiene.

Una vez salimos de los grandes asentamientos, las cosas cambian un poco. El mapa está repleto de caminos y asentamientos más pequeños, donde podemos encontrar numerosos secretos. Además, aquí jugamos con la baza de poder conducir el conocido speeder. Su manejo es bastante sencillo de pillar, y aunque podemos prescindir de él, lo cierto es que no es algo que a simple vista recomendaría. Y es que, aunque haya bastante contenido, se nota que hay hectáreas de metros cuadrados que recorrer. Habrá que esperar al juego final para saber si se acabará haciendo pesado, pero esa no ha sido mi primera impresión.
Olvídate de las espadas láser: aquí eres un mercenario
La jugabilidad de Star Wars Outlaws es algo que ha dado mucho de que hablar en las últimas semanas. Muchos han puesto en tela de juicio el funcionamiento del juego y la inteligencia artificial del mismo. Lo que yo os puedo decir es que no solo me lo pasé genial durante las horas que estuve jugando, sino que además el comportamiento de la inteligencia artificial me sorprendió para bien.
Tal y como se demostró en el gameplay compartido durante el Ubisoft Forward, tendremos dos métodos para superar las misiones: acción pura y dura o sigilo. Lo interesante es que, aunque existe libertad para seguir un método u otro, hay misiones que sí que nos obligarán a tratar de pasar inadvertidos. Lo cierto es que en estas primeras horas el sigilo me pareció muy satisfactorio. Casi todos los niveles han sido diseñados pensando en que puedas exprimir esta mecánica, en la que nuestro compañero Nyx será fundamental.
El pequeño animal que nos acompaña servirá tanto de método de distracción como de un primer ataque que puede decantar la balanza a nuestro favor. En más de una ocasión en la que había dos enemigos enviaba a mi pequeño acompañante a atacar a uno de ellos para acabar con el otro, y mientras este trataba de deshacerse del animal, poder ejecutar un golpe que lo noquease sin que se descubriera mi presencia. Además, también será necesario para desbloquear ciertos elementos de los escenarios para seguir avanzando.
Pero muchos os preguntaréis qué tal es Star Wars Outlaws en la acción pura y dura. Se nota que detrás del juego está la gente que trabajó en The Division, pues nos encontramos con un gunplay pulido y realmente satisfactorio. A pesar de lo visto estos últimos días, yo no tuve la sensación de encontrarme ante esponjas de balas (algo que sí acusaba su anterior trabajo). Además, los enemigos son bastante reactivos a nuestros disparos, algo que siento fundamental en este tipo de títulos.
En el juego contaremos con tres tipos diferentes de estos disparos. En primer lugar, está el clásico cañón de láser, con el que atacaremos a la mayoría de enemigos. En segundo lugar, tenemos otro tipo de munición pensada para droides y escudos. Y, por último, tenemos una especie de tiro tranquilizante pensado para apostar más por el sigilo. Además, a estos tres tiros hay que sumar una especie de tiempo bala que nos permitirá escoger a varios enemigos para acabar con ellos de una tacada. Como veis, hay una amplia variedad, y ya os digo que al controlarlo es muy divertido.
El último elemento del que os quiero hablar es de las batallas espaciales. La primera sensación es que se pueden hacer algo toscas, pero conforme pasa el tiempo te vas acostumbrando a los controles. En este caso contamos con dos armas básicas: láseres y misiles. Antes de poder jugar, tenía la preocupación de que la precisión fuese un problema en este tipo de fases, pero nada más lejos de la realidad. Habrá que ver que ocurre cuando haya más enemigos en pantalla, pero lo que pude probar me dejó unas sensaciones positivas en este aspecto.
En conclusión, todavía hay que esperar a jugar al juego final para saber si Star Wars Outlaws mantendrá el nivel visto por los juegos desarrollados por Respawn Entertainment, pero mis primeras impresiones son realmente positivas. La jugabilidad me parece muy bien calibrada, la ambientación demuestra amor puro y duro por la franquicia y aspectos como el sistema de reputación parecen que realmente tendrán influencia en el juego. Habrá que ver que ocurre con el tamaño del mapa y con otros aspectos, pero de momento parece que Star Wars Outlaws tiene todo para ser el juego del verano.