A pesar de que dentro de nuestras fronteras Microsoft siempre ha tenido más problemas para alcanzar una alta popularidad entre los usuarios, la situación en Norteamérica ha sido habitualmente distinta. Sin embargo, desde el pasado mes de abril, Xbox One no había conseguido alcanzar el primer puesto como consola más vendida dentro de Estados Unidos.
Eso ha vuelto a cambiar en octubre, y ha ocurrido en gran medida gracias al enorme éxito del esperadísimo Halo 5: Guardians. Pero también gracias al estreno de otros títulos exclusivos importantes como Rise of the Tomb Raider, Forza Motorsport 6 o Gears of War: Ultimate Edition. Y por supuesto, la New Xbox One Experience, que al fin llegó a todos los usuarios durante el día de ayer y ha traído consigo la ansiada retrocompatibilidad con Xbox 360.
Por tanto, según los datos del NPD, Xbox One ha sido la consola más vendida durante el mes de octubre. Por delante de las consola portátiles, que han bajado considerablemente sus ventas, al igual que las consolas de la pasada generación. Y por delante de sus competidoras directas, PS4 y Wii U. Mientras que Halo 5: Guardians ha sido también el juego más vendido del mes. En total, la consola de Microsoft ha tenido un crecimiento de ventas del 81% con respecto al pasado año. Una cifra nada desdeñable, y es que este es el mejor momento para tener una Xbox One en casa.