En un año en el que están produciéndose algunos de los estrenos más importantes de todo lo que llevamos de generación, el género de la lucha ha querido demostrar porque antaño fue uno de los más influyentes en los videojuegos, especialmente en aquella época donde teníamos que trasladarnos a unas recreativas para poder liarnos a mamporros contra nuestros amigos. La primera piedra fue tirada por Capcom, que con Street Fighter 6 ha conseguido devolver a una de las sagas más emblemáticas al Olimpo del género, y ahora le toca seguir el testigo a NetherRealm.
El estudio liderado por Ed Boon ha querido estrenarse en Xbox Series X|S y PlayStation 5 con su saga más emblemática, y no ha pretendido hacerlo de cualquiera de las maneras. Primero, con un cambio de motor gráfico, y del que ya os adelantamos que carece de cualquier tipo de sentido que esto sea Unreal Engine 4; y segundo, con un cambio jugable que quizás podía parecer extraño en la saga, pero que ya adelantamos que apuntaba grandes maneras. Si finalmente el resultado final ha sido satisfactorio o no os lo contamos a continuación es nuestro análisis de Mortal Kombat 1.
https://www.youtube.com/watch?v=ZCReWH2f6RM
Análisis de Mortal Kombat 1
Una Kampaña muy peliculera
Aunque muchos podrían pensar que Mortal Kombat 1, dado su nombre, es un reinicio absoluto de la franquicia, lo cierto es que la realidad es diferente. Como ya se ha comentado en anteriores ocasiones, esta nueva entrega de la franquicia es una continuación directa de Mortal Kombat 11, después de que Liu Kang se convirtiera en el Dios del Fuego y Guardián del Tiempo. Al ver como había fallado el universo, el otrora campeón de la Tierra decidió crear una nueva línea temporal desde 0, donde todas las personas podrían disfrutar de algo que la anterior creadora no brindó a los habitantes de los reinos: la paz. Sin embargo, y como ocurre en la vida real, todo dependerá de las acciones de los habitantes de dichos reinos.
La historia de Mortal Kombat 1 entraña mucho más que una mera excusa para partirse la cara contra otros adversarios. Una crítica a la sociedad, homenajes a grandes producciones y mucho más están presentes en una trama que comienza mostrando como los reinos han logrado que todos sean prósperos. Esto es algo que queda patente incluso con el diseño visual de los primeros escenarios del juego, dejando de lado ese tono oscuro y terrorífico que otras entregas de la saga presentaban incluso desde el primero de los combates.
Sin embargo, todo es pura fachada. Después de miles de años desde que Liu Kang decidiera crear este nuevo universo, las redencillas, secretos y traiciones llegarán a un punto en el que el Mortal Kombat será mucho más que un torneo, y del cual no os queremos revelar nada más, pero os aseguramos que será capaz de engancharos tanto o más como las últimas historias que la franquicia ha propuesto en sus últimas entregas.
En NetherRealm se han convertido en auténticos maestros al tratar de ofrecer una historia cinematográfica. No solo por el contenido en sí de la misma, y que cualquier fan de Mortal Kombat firmaría para una adaptación a la gran pantalla; sino porque el juego está “rodado” de una forma que realmente parezca que estemos ante una película. Esto es algo que ya se podía ver en la última entrega, pero esta es, sin duda alguna, la obra culmen del estudio hasta el momento. Como si de un film se tratara, el estudio juega con maestría con los ángulos de cámara, con la fotografía (de la que hablaremos adelante) y con una fluidez en las transiciones de cinemática-combate que no dejan más que un gran sabor de boca.
La Torre de Babel
El modo campaña (y no hablamos de un eufemismo, realmente se llama así) no es, ni mucho menos, lo único que podremos encontrar en el juego. Si bien es cierto que el trabajo realizado por NetherRealm en este sentido es sublime, no se han descuidado otras experiencias, aunque apostando por un claro elemento: la sencillez. En Mortal Kombat 1 volverán a estar presentes modalidades como el versus, el online o las Torres. Sin embargo, el estudio ha apostado en esta ocasión por reducir las amplias variantes que existían en algunos de estos modos en anteriores entregas, optando por un contenido final mucho más pulcro, y que encaja a la perfección con lo que la narrativa del título nos ofrece.
En el aspecto online, hay poco más que añadir que lo que ya contamos en nuestras primeras impresiones del juego. La inclusión del rollback netcode hace del multijugador una experiencia tremendamente satisfactoria. En ninguna de nuestras peleas tuvimos problema alguno al luchar contra nuestros oponentes (más allá de que alguno de ellos tuviera una habilidad fuera de nuestro alcance). Además, el juego ofrece diferentes opciones. Por un lado, tenemos el versus clásico, en el que simplemente buscaremos una partida contra otro rival y empezaremos a pelear.
No obstante, lo realmente interesante para los más competitivos se encuentra en el sistema de clasificación por temporadas, que recuerda a otros vistos como los de la saga FIFA. Conforme vayamos ganando partidas, iremos avanzando en la “categoría” en la que nos encontremos. Además, aquí se habla de temporadas al más puro estilo juego como servicio, ya que estas estarán limitadas a X número de días, tras las cuáles dará comienzo una nueva temporada.
Hablando ya de los modos offline, ya hemos comentado que tendremos a nuestra disposición los clásicos modos versus y torres, donde podremos pelear con amigos en el caso del primer, o en el que tendremos que acabar con varios enemigos de una sola vez en el caso del segundo. En este aspecto también se han perdido algunos modos en comparación a otros títulos, pero lo cierto es que la llegada de las Invasiones solventa estas ausencias. En este modo de juego deberemos escoger un personaje (que podremos cambiar más adelante) y desplazarnos por un tablero que se basará en los diferentes escenarios que encontramos en el juego: la Mansión de Johnny Cage, el pueblo nativo de Raiden o Kung Lao y otros más.
En las Invasiones el objetivo es claro. Deberemos limpiar el tablero y llegar a la casilla final, y para ello deberemos realizar combates, pruebas, desafíos y mucho más. La experiencia nos ha resultado realmente atractiva, y además de ser bastante entretenida será un lugar recurrente para los jugadores que quieran obtener el mayor número de desbloqueables posibles. Porque sí, aquí están presentes montones de colores alternativos, monedas del juego e incluso reliquias.
Este modo de juego también sigue el sistema de temporadas que hablábamos anteriormente, por lo que si queremos conseguir todos los coleccionables será un modo al que recurriremos habitualmente. Y lo mejor de todo es que NetheRealm lo ha hecho pensando en ofrecer variedad, ya que tendremos incluso la posibilidad de mejorar a nuestro personaje con un pequeño toque RPG. Sin lugar a dudas, un trabajo casi perfecto, y decimos casi porque, incomprensiblemente, en este modo el idioma principal será el inglés, a pesar de tener seleccionado el español en las opciones del juego. Intuimos que se tratará de algún bug, pero no lo sabemos con seguridad.
El Kameo se gradúa
Mortal Kombat 1 ofrece todo lo que siempre ha caracterizado a la franquicia: brutalidad, sangre y diversión a raudales. Aunque todo lo anterior fuera tan positivo como os lo hemos contado, el resultado final palidecería si a los mandos el juego no fuera una experiencia satisfactoria. La realidad es que no podría ser más diferente. NetherRealm ha logrado pulir un sistema de combate que irremediablemente bebe mucho de lo que ya pudimos ver en Mortal Kombat 11, pero lo potencia gracias a dos elementos que hacen de las peleas del juego algo mucho más espectacular y divertido: el frenetismo y los kameos.
Sobre el primero, el ritmo de las peleas de Mortal Kombat 1 posiblemente sea el más elevado de lo que hemos visto en anteriores entregas. Aunque no llega a lo visto en juegos como los desarrollados por Arc System Works, lo cierto es que probablemente sea el juego de lucha más frenético del año. Esto lo logra principalmente gracias al renovado moveset de los personajes, que, si bien siguen manteniendo muchos de sus golpes clásicos, ahora también se han incorporado combos que favorecen esta continuidad en la lucha. Además, lo mismo ocurre con las animaciones del juego, ya os adelantamos que se trata del juego más fluido que el estudio ha realizado hasta la fecha, y todo ello suma al conseguir ese frenesí en sus peleas.
Respecto a los Kameos, poco podemos decir que no hayamos dicho ya. Tras varias horas a los mandos no podemos concluir otra cosa que no sea elogiar la decisión de haber incorporado este elemento a la saga. La presencia de los personajes de apoyo no solo puede ser un auténtico game changer en determinadas partidas, sino que, una vez más, potencia la espectacularidad y continuidad de los combates. Pero que el ritmo de las peleas no os engañe, ya que con la inclusión de este sistema se incorpora un elemento realmente estratégico, tanto a la hora de alargar nuestros combos como al tratar de escapar de las garras de nuestro rival.
Desde un primer momento, el juego ya nos advierte que hay personajes kameo que tienen una mejor sinergia con algunos luchadores principales que con otros. Esto queda patente cuando empezamos a pelear, ya que hay combinaciones que y combos que tan solo podremos realizar con un determinado personaje de apoyo en nuestro equipo. ¿Lo mejor de todo? Que apenas se ha arañado la superficie de que lo que la comunidad será capaz de crear con este sistema, y que de seguro logrará que Mortal Kombat 1 se alce entre los principales protagonistas en torneos como el EVO.
Aunque ya hayamos hecho una ligera mención en este aspecto, es necesario destacar el gran trabajo que NetherRealm ha realizado en la selección de la plantilla de luchadores. De lanzamiento contaremos con un total de 23 luchadores (que se verá ampliado tras el lanzamiento del Kombat Pack), superando de primeras a su principal rival en estos momentos: Street Fighter 6, que cuenta con siete personajes menos entre su elenco. Además, respecto a los luchadores kameo la cifra llega hasta 16, aunque inicialmente “tan solo” contaremos con 10 elegibles, teniendo que desbloquear el resto de ellos.
La sensación es que la plantilla escogida por el estudio, tanto de luchadores principales como de personajes kameo, no podría haber sido más acertada. Es cierto que existen ausencias que serán echadas en falta por muchos fans, pero no cabe duda de que el plantel inicial logrará convencer a los que lleven bastante tiempo siguiendo el trabajo de NetherRealm. Eso sí, lo que no nos ha gustado es que desde el principio haya personajes que claramente hayan sido recortados de la plantilla principal.
Mortal Kombat 1 es una maravilla técnica
Visto el fantástico acabado técnico que Street Fighter 6 presenta, haciendo uso del que promete ser el motor más popular de los próximos años, el Unreal Engine 5, podríamos pensar que Mortal Kombat 1 caería a la grava en su lucha por superar al juego de Capcom. Sin embargo, ya os adelantamos que para nada es así. En anteriores entregas se demostró que el equipo de la franquicia ha sido capaz de exprimir el uso de los motores a niveles demenciales, y es algo que vuelve a ocurrir en esta entrega.
Mortal Kombat 1 hace uso de Unreal Engine 4, una decisión que cuando fue desvelada no fue comprendida entre los fans de la serie; primero por la disponibilidad de la siguiente versión del motor, y segundo porque parecía imposible que lo visto corriera en el motor que tanto se ha utilizado en la anterior generación de consolas. Pues lo cierto es que así es. El trabajo realizado por NetherRealm para optimizar el motor gráfico de Epic puede ser considerado auténtica magia negra, como la que emplea Shang Tsung en sus batallas.
Ya os hemos adelantado previamente que las animaciones de los personajes se encuentran a un nivel como nunca antes habíamos visto en la franquicia, y lo mismo ocurre con todo el apartado visual del juego. Los escenarios del juego cuentan con un nivel de detalle auténticamente demencial, incluidas las dos variaciones (día y noche) que presentan, que permiten al juego hacer alarde del fantástico sistema de iluminación que presenta. Y a esto hay que sumar todos los efectos que vemos en pantalla durante nuestras peleas: poderes, golpes, sangre, y todo lo que puedas imaginar. El apartado gráfico es simplemente alucinante.
Por si fuera poco, el mimo realizado por NetherRealm de cara a los diferentes mercados es digno de admirar. Mortal Kombat 1 llega completamente traducido y doblado al castellano (salvo el problema que os comentábamos anteriormente con las Invasiones). El nivel general del doblaje es notable, aunque sí es cierto que hay algunas voces que aparecen a lo largo de la historia que no parecen haber sido escogidas con el mejor criterio posible.
Análisis de Mortal Kombat 1 – Conclusiones
Mortal Kombat 1 es un auténtico juegazo. No podemos concluir otra cosa del último trabajo de NetherRealm Studio. Las novedades jugables hacen del juego la entrega más fluida y divertida de las vistas en los últimos años, con unas posibilidades que no harán más que crecer con el paso del tiempo, gracias a la inclusión de nuevos personajes y a lo que la comunidad logrará encadenar en sus peleas.
A lo anterior hay que sumarle que presenta uno de los mejores modos historia de los últimos años en el género, además de una variedad perfecta en modos de juego, que encuentra en las Invasiones una propuesta que de seguro logrará convencer a muchos fans de la franquicia. Y por si eso fuera poco, la presencia del rollback netcode convierten las partidas online en una completa delicia.
Finalmente, cabe destacar el trabajo realizado en el apartado técnico. Viendo el juego es imposible decir que no haya sido desarrollado con la última tecnología disponible, ya que es fácilmente uno de los juegos más bonitos de lo que va de año (y de la generación). Solo queda quitarse el sombrero ante el trabajo realizado por Ed Boon y su equipo.