Anoche, Activision-Blizzard desveló la hoja de ruta de algunas de sus sagas. Por parte de Blizzard, parece que World of Warcraft y Overwatch van viento en popa y la compañía madre de algunas de las mejores sagas de los videojuegos continuará con las temporadas de Overwatch a lo largo de este año. Sin embargo, lo más interesante tiene que ver con Destiny 2 y el nuevo Call of Duty.
Sobre este último, hay poco que contar. Sledgehammer Games, compañía que este año se hará responsable del nuevo Call of Duty, ha confirmado que la saga volverá a sus orígenes. ¿Qué significa eso? Aún no tenemos ni idea, pero muchos usuarios en redes sociales ya están dando por sentado que volveremos a la Segunda Guerra Mundial. Lo más interesante es, sin embargo, lo que tiene que ver con Destiny 2. Y es que, Kotaku ha tirado de fuentes (y de la manta).
Activision ha confirmado, de nuevo, que Destiny 2 saldrá este 2017 y tendrá grandes cambios. Para empezar, como leemos en Reddit, parece que no se podrán importar personajes de Destiny a Destiny 2, un detalle que no será del agrado de todos, pero que parece lógico teniendo en cuenta que Activision quiere hacer el juego más accesible para los jugadores casuales (sin perder la esencia del primer juego, algo que veremos cómo lo consiguen).
Además, parece que Destiny 2 contará con una campaña muy cinematográfica que, seguramente, se alejará de la del primer juego, ya que fue uno de los apartados que más críticas recibió. Sin embargo, lo »gordo» viene ahora. Y es que, Bungie no quiere precipitarse a la hora de mostrar Destiny 2, algo que ya ocurrió con el primer juego y que, en el lanzamiento, le salió regular a Bungie y Activision. Por eso, se espera que, tras la actualización de primavera del primer Destiny se muestren los primeros detalles de Destiny 2.
Además, Kotaku ha afirmado que el juego llegará, casi al cien por cien, este año debido a un acuerdo entre Activision y Bungie que permitiría a la gigante norteamericana absorber gran parte de las acciones de padres de Halo si estos no consiguen lanzar el juego este año. Es una medida de »asegurarse» por los posibles perjuicios, al fin y al cabo estamos hablando de empresas, pero, como imaginaréis, esto debe provocar una presión enorme en Bungie.