Esta semana anunciamos que dos nuevos juegos se unían a la retrocompatibilidad de Xbox One. Se trata de Spec Ops the Line y The Darkness II, dos shooter de 2K creados por diferentes estudios que plantean la acción desde dos puntos de vista radicalmente opuestos.
Spec Ops the Line es un shooter en tercera persona con mecánicas de cobertura similares a las de Gears of War, aunque sin llegar a su excelencia, lo que nos deja un apartado jugable no tan pulido como nos gustaría. Además de los tiroteos, que son intensos debido a la acumulación de enemigos (que, básicamente, llegan por hordas), lo realmente interesante del juego es la manera de plasmar la guerra.
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Y es que, Spec Ops the Line es un juego de corte bélico ambientado en un futuro cercano en el que Dubai es un desierto, tanto por la escasez de agua, un recurso muy valioso, como por cómo ha quedado debido a la guerra. Formaremos parte de un equipo de élite en una misión de rescate que, sin quererlo, se verá envuelto en algo muy grande que no entenderemos al principio.
Es un juego con un par de decisiones duras y momentos visualmente impactantes que mostró otra faceta de los juegos de guerra muy alejada del patriotismo de títulos como Call of Duty. Visualmente no estaba nada mal, pero los años no pasan en balde y en Xbox One, la normal, no la X, se nota el paso del tiempo, con bastantes jaggies para un juego que en Xbox 360 no lucía nada mal. Os dejamos un gameplay para que veáis el juego en funcionamiento: