Desde hace unos días, el juicio entre la FTC y Microsoft ha estado desarrollándose bajo el mandato de la jueza Corley, siendo un procedimiento que está dejando informaciones realmente impactantes en todos los sentidos. Sin ir más lejos, las informaciones que han aparecido entre los documentos confidenciales de Microsoft han confirmado que la compañía llegó a monitorizar a Sony y Nintendo como posibles adquisiciones, aunque probablemente fuera algo que se descartase de forma casi inmediata.
No obstante, este no es el único juicio que se está desarrollando en estos momentos. Concretamente, la propia jueza Corley tiene entre manos otra causa judicial que, en esta ocasión, tiene como protagonistas a un grupo de jugadores y a la propia Microsoft, que fue demandada por la posibilidad de recaer en prácticas monopolísticas si se acababa certificando la compra de Activision Blizzard.
La jueza Corley desestima parcialmente el recurso de Microsoft
Pues bien, en las últimas horas se ha confirmado que la jueza Corley ha desestimado en mayor parte el recurso presentado por Microsoft frente a esta demanda presentada por los jugadores. No obstante, sí que ha estimado algunos elementos importantes, como por ejemplo que la compra de Activision Blizzard no conllevaría efectos anticompetitivos en lo que a juegos AAA se refiere, por un error en la argumentación de los demandantes.
No obstante, Corley se puso del lado de los jugadores cuando Microsoft aseguró que no habían demostrado de manera suficiente que se verían perjudicados de forma directa por la compra, fundamentándose en el argumento de uno de ellos. «Por ejemplo, Galván atestigua que jugar videojuegos es importante para su vida y su método principal de mantenerse en contacto regular con muchos de sus seres queridos y es parte de su rutina diaria».
Finalmente, la jueza Corley también se pronunció contra las afirmaciones de Microsoft que aseguraban que el daño por la posible salida de Call of Duty de PlayStation no eran plausibles, ya que su intención no era sacar el juego de la plataforma de Sony, sino hacerla llegar a más jugadores gracias a servicios como Game Pass. Ante esto, la jueza aseguró que será algo que deberá determinar al pronunciarse sobre el fondo de la cuestión, y que era algo prematuro.
Por tanto, finalmente se decidió estimar en gran parte el argumento presentado por los jugadores, mientras se desestimaba alguno por la mejor práctica de los abogados de Microsoft. Cabe destacar que se trata de una causa alejada del juicio de la FTC, por lo que a priori no tendrá conexión alguna con dicho caso.
