Respondiendo a una consulta realizada por el portal de videojuegos Gamasutra hemos podido saber que el Departamento de Gambling Compliance de Nueva Zelanda, que es el encargado del juego y apuestas, considera que las cajas de botín o lootboxes no cumplen con la definición legal de apuesta.
Después que varias comisiones de juego de distintos países se pronuncien ahora es Nueva Zelanda quien habla sobre si pueden considerarse legalmente apuestas, lo que comportaría una regulación más estricta en la distribución de los videojuegos que contengan lootboxes.
Según uno de los portavoces del organismo de Nueva Zelanda, Trish Millward, han seguido de cerca el debate internacional que ha generado la polémica. Pero no creen que las cajas de botín o lootboxes cumplan con la definición legal de los juegos de azar según el Gambling Act de Nueva Zelanda de 2003; ya que «los jugadores no compran cofres de este tipo buscando ganar dinero o algo que pudiera convertirse en dinero«.
El distribuidor de Red Dead Redemption 2: «las cajas de botín no son apuestas»
El gobierno de Nueva Zelanda parece estar adoptando un enfoque conservador sobre el concepto de apuesta. De todas maneras, ninguna legislación regula las cajas de botín y esto provoca que no todos los países estén pronunciándose de la misma manera.
En la actualidad, hay reguladores del juego que han afirmado que las cajas de botín son apuestas como Bélgica, y en cambio otros como Gran Bretaña que opinan igual que Nueva Zelanda.
Así que, deberemos esperar a ver si los diferentes países regulan el uso de las cajas de botín y si las categorizan como juegos de azar.