Xbox Design Lab es un sistema de personalización que Microsoft puso en marcha hace varios meses en Estados Unidos, y que permite a los usuarios crear sus propios diseños de mandos personalizados. Xbox Design Lab ha confirmado su llega a España para este mismo verano, permitiendo también a los jugadores dentro de nuestras fronteras poder crear sus propios mandos. El sistema ofrece una amplia variedad de opciones estéticas para crear nuestros mandos (irán llegando más), y nosotros hemos estado pasando ya buenos ratos trasteando y creando diseños. Al final, nos hemos quedado prendados de algunos de ellos. Estos son los mandos de SomosXbox creados con Xbox Design Lab, que queremos ahora compartir con vosotros. ¿Cuáles son los vuestros?
Alejandro Alcolea
Vale, mi mando parece un popurrí de colores digno de la pistola de maquillaje de Homer Simpson, pero cada uno de los componentes y su color tiene una explicación. El cuerpo tenía que tener un color discreto, ya que es un mando que voy a tener ‘’de exposición’’ y quería que resaltaran otros elementos del mismo. El color es discreto, pero me recuerda a Halo 5 y esos tonos grises del último título. Hablando de Halo, los botones superiores son naranjas como la visera del Jefe y, cómo no, metálicos para darle ese toque tan chulo que tiene el casco de John 117.
La parte trasera tiene grips, por si me da por usar el mando. He querido juntar los colores de los juegos de Xbox One a los que más tiempo le he dedicado estos años y, cómo no, Destiny ocupa un lugar importante en mi estantería. Siempre me gustó que mi guardiana tuviera armadura blanca y de ahí los colores de los botones frontales.
Por otro lado, Forza Horizon 2 me hizo disfrutar muchísimo (y fue el juego con el que me llevé la consola a casa) y de ahí los dos sticks color Lambo Huracán. La cruceta metalizada es en honor a Gears of War y, cómo no, he personalizado el mando con mi nombre de usuario.
Gabriel Villapol
En cuanto supe que los mandos personalizados que tanto éxito estaban teniendo hasta ahora en territorio estadounidense iban a llegar a Europa, me puse manos a la obra e intenté crear un mando que estuviese completamente diseñado a mi gusto. El resultado fue de lo más curioso, y es que finalmente a pesar de tener un diseño de lo más escueto, había reflejado casi sin darme cuenta la habitación en la que suelo adentrarme en mi afición favorita, los videojuegos, un lugar que se convierte al menos una vez por semana en un verdadero templo de la diversión en el que podré disfrutar a partir de ahora con mi sencillo mando personalizado.
Alejandra Pernías
Las funciones del Design Lab para los mandos de Xbox One son fáciles de utilizar y muy intuitivas. Es muy sencillo cambiar los colores a nuestro gusto. He rehecho el mando varias veces para quedar completamente contenta con el resultado combinando los colores que realmente necesito para que sea cien por cien personalizado. El azul es predominante y el naranja complemento, para lo demás he utilizado detalles más sobrios como el negro o el gris.
Daniel Villagrasa
Como podéis ver en mi mando predomina el rojo y obviamente el motivo se debe a mi pasión por una de las sagas más icónicas de Xbox: Gears of War.
La base roja, como he comentado se debe a Gears. Luego las otras decisiones de diseño han sido más estéticas para que quede en consonancia que otra cosa. Los botones XYAB resaltan en blanco sobre negro y los de guía y start son completamente blancos. La cruceta he decidido que sea metálica y de color blanco para hacer juego. Los sticks rojos para seguir el tono de la carcasa.
Por detrás he añadido el grip para que la textura de donde se agarra el mando sea más cómoda y no resbale. Los gatillos son metálicos y de un color oscuro para ser más discreto en cambio los botones LB y RB son de un gris algo más claro. La base trasera es negra para dar un toque más crudo y a juego con el grip.
Para finalizar, he añadido mi Gamertag en la parte delantera del mando como todos mis compañeros. ¡Espero que os guste!
Miriam López
El color que predomina en mi mando es el azul, es uno de mis colores favoritos, por sino os habíais dado cuenta. Además, es el color predominante de uno de mis juegos favoritos, Ori and the Blind Forest. El blanco de la parte trasera es un toque a lo Xbox One S que tanto me gusta y le da un punto de elegancia. Además, es el color del pequeño Ori.Tanto los gatillos como la cruceta son metálicos ya que el tacto me gusta más y el brillo metálico es más molón. Le he puesto grip ya que es mucho más cómodo el agarre y se siente mejor en las manos. Los botones frontales son de color porque así quedan más vistosos y le da un punto de color al mando. Y por último, esta grabado mi gamertag para hacer el mando todavía más personal si cabe.
Los mandos personalizados de Xbox Design Lab estarán en la Gamescom 2017
Raúl Manero
Lo cierto es que, personalmente, no se me da especialmente esto de combinar colores y demás, y después de realizar distintas combinaciones (a cada cual peor que la anterior), me decidí por esta combinación de rojo y azul. Debe ser que como seguidor del Barça esta combinación me gusta, o al menos estoy habituado a ella. El mando también cuenta con un detalle en amarillo, se trata de los botones RB y LB, el motivo por el cual decidí darles este toque más llamativo era para romper con la uniformidad, y para que fueran fácilmente identificables de un vistazo.
Bart de la Cueva
Inspirado en el mítico conjunto que calzaba el sempiterno Bruce Lee en el clásico ‘Game of Death’ (1978), este mando mezcla Lightning Yellow y Abyss Black para rendir homenaje a uno de los personajes más influyentes de los 70 y cuyo legado nos acompañará hasta el resto de nuestros días. Aparte de sus característicos colores, el acabado metálico tanto para el pad direccional como para los gatillos, convierten a este periférico en una herramienta perfecta para juegos de lucha. El toque naranja fuego para LT/RT y el acabado trasero de goma, para un mejor agarre, hacen que desee este mando de manera enfermiza. Todo gracias a Xbox Design Lab, que llegará este mismo verano a nuestro país.
Paloma Díez
A diferencia de los mandos de mis compañeros, tan llenos de vida y color, yo os traigo un mando más «serio». Pero tiene su por qué. A mí los colores vivos suelen cansarme y por eso siempre suelo decantarme por tonos más neutros: azules poco llamativos (azul hielo o grisáceo), marrones o verdes militar. O gris, como es el caso.
La base gris es sencilla pero elegante. Al ser un color muy neutro, no nos cansaremos de él aunque pase el tiempo. Por otro lado decidí meterle un color potente y llamativo como el rojo para que se notara el contraste, además de mantener el color clásico de los botones de Xbox.
Gris y rojo son colores importantes y representativos para la casa: son los colores de Halo y Gears of War. Pero también son los colores de grandes juegos que me han marcado: Silent Hill, Star Wars: Caballeros de la Antigua República (este mando es Darth Malak puro y duro) y hasta Max Payne 3 (sin lluvia ni traje gris, Max Payne no es Max Payne). Así que mi mando no podía ser de otros colores.
Alberto Cordero
Como veis mi diseño es bastante sencillo. Xbox Design Lab ofrece un motón de opciones, pero a mí me parece más elegante un diseño más simple, con pocos colores y más ordenado. Con esto en mente, he elegido el color verde eléctrico como base de mi mando. La principal razón es que quería un mando que representase, en cierto modo, lo que es Xbox para mí. Y el color verde me ha acompañado desde Xbox 360 en los avatares y fondos de pantalla e interfaz que he usado en mis consolas y juegos. Además los colores claros me suelen atraer más que los oscuros. Por otro lado me gustaba mucho el color blanco que podemos elegir, y me ha parecido que combinarlo con él al usarlo en los botones frontales le daba ese toque distintivo que gustaba, y combinaba con mi Xbox One S a la perfección.
También he usado el color blanco en los gatillos, ya que al meterle los grips (necesariamente negros y bastante más cómodos), el diseño perdía su identidad en la parte trasera. Los toques metálicos son tentadores, pero no terminaban de tener sentido en mi diseño. Y por último no podía faltar mi gamertag, en mayúscula, tal y como lo uso en Xbox Live. Una pena no poder elegir también el color de las letras, porque con el blanco habría quedado de lujo. Aunque tal y como está, ya me costaría mucho despegarme de él.