La compra de Activision Blizzard sigue avanzando en multitud de territorios, a pesar de la negativa de la CMA, el máximo organismo de competencia del Reino Unido, a dar luz verde a la operación. Después de recibir el visto bueno de la Comisión Europea y del organismo de competencia Chino, ahora la adquisición vuelve a ser objeto de buenas noticias para los intereses de Activision y Microsoft.
Tal y como hemos podido saber gracias a koreajoongangdaily, la compra de Activision Blizzard ha sido aprobada por parte de la FTC de Corea del Sur. Al igual que pasó con su homólogo chino, el organismo de competencia del país ha decidido aprobar la adquisición por parte de Microsoft a cambio de 68,7 millones de dólares, asegurando que esta operación no dañará de forma alguna la competencia del mercado de videojuegos.
La FTC de Corea del Sur aprueba la compra de Activision Blizzard sin ningún tipo de concesión
¿Y qué ha pedido a cambio para aceptar la compra? Pues la realidad es que absolutamente nada. A pesar de que la Comisión Europea exigió la necesidad de que todos los grandes juegos de Activision Blizzard estuvieran disponibles sí o sí en todas las plataformas de la nube del mundo (algo que podría justificar la falta de concesiones en otros territorios), el máximo organismo de competencia surcoreano no ha condicionado la operación a ningún tipo de concesión por parte de Microsoft o Activision.
Como hemos dicho, la FTC de este territorio ha asegurado que no han encontrado ningún tipo de elemento que pudiera afectar negativamente a la competencia del mercado, razón por la que han aceptado la operación. Algunas fuentes señalan que este fallo podría venir motivado por la decisión de la Comisión Europea, que habría servido para que los organismos que planteaban ciertas dudas con el trato, hayan acabado disipándolas por completo, dando luz verde sin ningún tipo de problema.
¿Qué le espera ahora a Microsoft?
Una vez aprobada la compra de Activision Blizzard en Corea del Sur, el siguiente paso debería ser la decisión de Nueva Zelanda, que decidió retrasar su fallo al próximo 9 de junio. Una vez que el país oceánico haya decidido si aprobar o no la compra, el último escollo importante en el camino de Microsoft no será otro que el de la FTC de Estados Unidos, que sigue investigando la viabilidad de la compra de cara a que el mercado de videojuegos no se vea afectado por prácticas monopolísticas.